El camino hacia los músculos grandes y fuertes es largo y requiere mucho trabajo en un gimnasio. Pero los investigadores pueden haber encontrado un atajo donde los músculos crecen por sí mismos. De hecho, los científicos han logrado, mediante la terapia génica, aumentar la masa corporal magra y la fuerza de los monos macacos. El experimento fue bastante simple, los investigadores simplemente inyectaron el gen folistatina (FS344) directamente en los músculos del muslo derecho de los monos.
Se ha demostrado que la folistatina puede bloquear la miostatina, una molécula que regula a la baja el crecimiento muscular, pero fortalece los tendones. Ocho semanas después de la inyección, la circunferencia de los músculos del muslo derecho de los monos había aumentado en promedio un 15 por ciento en comparación con el muslo izquierdo. Un estudio realizado en dos de los monos mostró que la fuerza de los músculos de la pierna derecha aumentó en un 12 y un 36 por ciento respectivamente en comparación con la pierna no tratada.
La folistatina se inyecta mediante un vector viral, es decir, un virus asociado a adeno utilizado como transporte del fármaco que se inyecta.
Es un método común llamado terapia génica y se ha utilizado en humanos con otros medicamentos.
El estudio de los monos no mostró efectos secundarios negativos.
Esta terapia se está desarrollando para su uso en pacientes con distrofia muscular grave y otros trastornos de desgaste muscular.
Los ensayos clínicos en humanos deben comenzar en 2011 y el Nationwide Childrens Hospital en Ohio ya ha obtenido fondos para el estudio. Hay una serie de estudios y ensayos clínicos en curso o previstos para el tratamiento de trastornos de desgaste muscular, entre algunas de las sustancias más interesantes se encuentran la folistatina como antagonista de la miostatina,
Ostarine, que es un SARM (modulador selectivo del receptor de andrógenos) y se encuentra actualmente en ensayos clínicos en humanos por GTx Inc. y también otro SARM con el nombre en clave BMS-564,929 que está siendo desarrollado por Bristol-Myers Squibb.
La posibilidad de que los atletas abusen de estas sustancias ha llevado a la Agencia Mundial Antidopaje a prohibir los SARM desde 2008.
Hasta ahora, solo la sustancia conocida como «SARMs S4» (Andarine) ha llegado al mercado y está siendo utilizada por un número limitado de culturistas profesionales y aficionados.
Se dice que sus efectos anabólicos son moderados y se ha informado que tiene algunos efectos secundarios temporales, entre los que la disminución de la visión nocturna es la más prominente.
El futuro de los medicamentos desarrollados para las enfermedades de desgaste muscular seguramente será de interés para los atletas y otros que deseen obtener una ventaja adicional.
Los próximos 5 a 10 años verán salir una gran cantidad de sustancias y algunas podrían ser buenos reemplazos para los esteroides anabólicos.
Estos medicamentos estarán disponibles a través del mercado negro para atletas profesionales y aficionados por igual, con efectos anabólicos sin precedentes y casi sin efectos secundarios negativos.
Autor: Kaizer Coutore